El camino de Los Callejones

 

Rubén Alexis Hernández

 

A propósito de los torrenciales aguaceros caídos en el estado Mérida, y el consecuente daño a algunas carreteras, es pertinente hacer referencia en este breve escrito a la antigua vialidad. Específicamente se reseña el camino de Los Callejones, tramo de la principal ruta que comunicaba a las poblaciones de Mérida y Barinas antes de la construcción de la actual vía, más o menos entre las zonas de Las Piedras (Mérida) y Barinitas. Tramo que presentaba pasos estrechos, precipicios profundos y otros aspectos geomorfológicos que dificultaban su recorrido, en especial durante la época lluviosa, cuando su tránsito podía completarse hasta en cinco días, mientras que durante la sequía se le podía recorrer en dos o tres días.

 

A pesar de las dificultades, dicho camino fue un elemento de primer orden para las comunicaciones entre Barinas y Mérida, posibilitando el tránsito de centenares de arrieros y otros personajes durante el periodo hispánico y parte de la etapa republicana. Ayudó a la consolidación del orden colonial en la provincia de Mérida, con su capital como eje político-territorial-administrativo en el occidente de lo que hoy día es Venezuela. A continuación, algunas referencias de los siglos XVIII y XIX, en las que se reflejan en parte la geomorfología y la importancia del camino de Los Callejones:

 

“ (…) a una legua y tres cuartos el pueblo de las Piedras y en la opuesta orilla está el camino de los Callejones que va a la pequeña ciudad de Barinas, y que se prefiere en tiempo de seca para ir a la de Caracas por más llano y corto, pero como nos informasen que las aguas de los días antecedentes habían descompuesto muchos pasos de estos callejones (…) evitar la detención que podríamos tener si continuaban las aguas cercados de los muchos ríos que atraviesan e impiden la comunicación fuera de la incomodidad de estos callejones, que por sus angosturas lo pendiente de ellos, y sus mal situados escalones son excesivamente trabajosos a las mulas de carga en los tres días que son necesarios para trasmontar esta cordillera (…)” (“Viaje muy puntual y curioso que hace por tierra don Miguel de Santiesteban desde Lima hasta Caracas en 1740 y 1741” ).

 

“(…) le consta que los Callejones que hay en el camino de esta ciudad á la de Barinas pertenece casi por mitad á una y otra jurisdicción (…), sabe que los citados Callejones no se han compuesto hace el espacio de treinta y seis años poco más ó menos (…), también es notorio que no obstante el mal terreno de dichos Callejones los trancitan diariamente arrieros que no solo llevan y traen quarenta y cinquenta mulas, sino ochenta y hasta ciento, con toda clase de cargas (…), igualmente publico y notorio que trancitan dichos Callejones hasta mujeres las mas principales que se han casado (…) y también varias niñas que han venido á tomar el hábito en el convento (…) hay dentro de esta jurisdicción caminos incomparablemente peores que el de los Callejones de Barinas (…)” (“Información jurídica acerca del camino de los Callejones”, 1804, en Documentos para la Historia de la diócesis de Mérida).

 

“Es también presisa e indispensable la composición y mejora del camino de los callejones ya que por esta via ó por Curbatí por la importancia de dar mas movimiento y a ser mas eficaz el comercio de esta provincia con la de Barinas” (Juan de Dios Picón. Estadística y Descripción geográfica, política, agrícola e industrial de todos los lugares de que componen La Provincia de Mérida de Venezuela, 1832).

 

“(…) se encuentran sus caminos en mal estado, especialmente el que conduce á Zamora por el partido Callejones que siendo de suyo fragoso no se puede construir ni casi reparar sino medianamente, porque siendo mui minimo el subsidio de la parroquia, tiene que atender á las demas vias (…)” (Jesús Manuel Jáuregui. Apuntes Estadísticos del Estado Mérida, 1887).